jueves, 12 de octubre de 2017

¿Para dónde va Margarita?

O P I N I Ó N

                                                                                                                      Jesús Rojas Rivera

La decisión no será fácil. A diferencia de lo que muchos aseguran, Margarita no es únicamente la esposa de un ex Presidente. Margarita Zavala Gómez del Campo tiene un arraigo profundo en el PAN, su padre Diego Zavala fue un pilar en la construcción de Acción Nacional. Abogada por la Escuela Libre de Derecho, ingresó al PAN hace 33 años en la Secretaría Nacional de Acción Juvenil, fue consejera nacional, dirigente de las mujeres de su partido y una activista incansable en el triunfo de Vicente Fox. 
 
Desde el miércoles por la noche comenzaron a correr fuertes rumores sobre la renuncia de su militancia blanquiazul, la aspirante presidencial buscará el cargo desde una candidatura “independiente”, en lo que se antoja para ser una elección testimonial encaminada al fracaso junto con las aventuradas candidaturas de Jaime Rodríguez “El Bronco”, Armando Ríos Piter “El Jaguar”, Carlos Mimenza, Alfonso Trujano Sánchez, Wendolin Gutiérrez Mejía, Héctor Luis Javalois Loranca, el periodista Pedro Ferriz de Con, Francisco Gerardo Becerra, Alfredo Pérez Mata, Édgar Ulises Portillo Figueroa y Roque López Mendoza, la mayoría de ellos personajes completamente desconocidos. Sin duda la ex Primera Dama brillará entre los desconocidos pero no le alcanzará para mostrar el mínimo de posibilidades. 
 
Pero la candidatura independiente de Zavala Gómez del Campo no se cocinó en la semana, las escaramuzas panistas ya tenían mucho tiempo. El grupo fiel al ex Presidente Felipe Calderón mantiene una lucha intestina contra la dirigencia nacional del PAN, las fracturas no son recientes y la amenaza con la conversión al “independentismo” viene de mucho tiempo atrás. 
 
Algunos amantes de las especulaciones hablan de jugadas en vertical que se extienden más allá del blanquiazul, que buscan la fractura de los panistas para el fortalecimiento de las aspiraciones de otro aliado calderonista cobijado en las siglas del tricolor: José Antonio Meade Kuribreña. Hombre formado en la escuela “tecnócrata”, parecen alinearse a su favor los astros dentro del PRI que permitirán candidaturas ciudadanas y el PAN que llegará, con toda intención, fracturado al proceso electoral del 2018.
 
Despejado el camino de los panistas en el Frente Amplio Opositor, Ricardo Anaya estará prácticamente en la antesala de la candidatura, a reserva de que los partidos agrupados encuentrenn un perfil idóneo para la postulación al cargo más importante a elegirse el año que viene. Dante Delgado de Movimiento Ciudadano ha expresado públicamente su respaldo al llamado “joven maravilla”, quien ha sido además el objetivo de feroces ataques desde el Partido Revolucionario Institucional. 
 
Margarita terminará de decidirse el futuro en el transcurso de hoy y mañana, algunos periodistas y columnistas nacionales aseguran que el anuncio será el día sábado 7 previo a su registro ante el INE. Para poder alcanzar la candidatura independiente Margarita y los otros deberán conformar una Asociación Civil y recolectar más de 800 mil firmas de apoyo ciudadano.
 
La gran pregunta que se hacen ahora los panistas es, de darse la ruptura y el registro independiente de la abogada, quiénes la seguirán en su aventura y cómo quedará el PAN después del zafarrancho. Los más conservadores predicen que el movimiento de Margarita terminará de sacar del blanquiazul a un grupo reducido de panistas leales y fieles a Calderón, pero que la gran mayoría de liderazgos efectivos y militantes con cargos se quedarán en la institución política.
 
Otros en tono alarmista presagian la catástrofe, la fractura final que pondría en riesgo incluso la continuidad del PAN. En mi opinión se deben tomar las cosas con serenidad para hacer valoraciones objetivas. La salida de Margarita es un golpe para Acción Nacional, pero las repercusiones no serán de proporciones mayores. Margarita se va pero todos los gobernadores del PAN, la gran mayoría de los diputados, senadores, presidentes municipales, diputados locales y el resto de los liderazgos se quedan a enfrentar la amenaza del populismo desde una sola trinchera, mientras Calderón y compañía operan la jugada del dos de bastos que busca ser carambola de doble banda. Luego le seguimos...

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